El pasado 29 de mayo se cumplieron 100 años del despegue del
primer avión construido en México. Según señaló la Sociedad Mexicana de
Estudios Aeronáuticos Latinoamericanos (SMEAL), este vuelo se dio en un
período (1912) en donde las actividades aeronáuticas eran todavía
escasas, en aquél entonces el ingeniero de origen francés radicado en
la capital, Jacques Poberejsky, encargó al mexicano Juan Guillermo
Villasana la construcción de un avión del tipo Deperdussin.
“Para ello, Villasana pidió al propietario de uno de esos aviones
tomar las medidas del mismo para hacer un modelo similar, y diseñó
primero los planos con las dimensiones y características del aparato”,
expuso el presidente de la SMEAL, Alfonso Flores.
El resultado fue un avión monoplano de ala alta dotado con un motor
de la marca Anzani de 80 caballos que el mismo Poberejsky trajo junto
con una hélice de madera en uno de sus viajes a Francia, con lo que
quedó instalado según la concepción del modelo y probado en tierra el 11
de abril de dicho año.
Recordó que fue hasta el 29 de mayo de ese año, en el Campo de
Balbuena en la Ciudad de México, cuando Poberejsky se subió a la
carlinga del avión construido a base de madera, herrajes metálicos y
forrados en tela, con la firme intención de remontar el cielo de la
capital.
El aparato, bautizado con el nombre de “Latinoamérica”, fue el
primero en construirse completamente en México y en la región del mismo
nombre, el cual completó el vuelo sin incidentes ni faltarle potencia
alguna.
Posterior a esto, Poberejsky voló el avión en distintas ocasiones con
gran éxito hasta que una noche el techo del hangar donde se guardaba
cayó, aplastando el aparato que no pudo repararse.
Juan Guillermo Villasana López, quien murió en 1959, fue uno de los
más importantes precursores de la aviación mexicana, y dentro de sus
aportaciones figura la invención de la afamada Hélice Anáhuac e impulsó
la aviación nacional hasta su muerte.
Fuente: Criterio Hidalgo
Juan Guillermo Villasana López
No hay comentarios:
Publicar un comentario